A todo cerdo le llega su San Martín, a todo concursante de Gran Hermano volver a la vida real, y a toda madre trabajadora el momento de reincorporarse al currele tras la baja maternal. Todas estas situaciones implican drama.
En este país en el que vivimos (Sssspain, one point) la baja maternal es una caca de vaca. Bueno, una caca de vaca es más grande que la baja (y seguramente huele mejor). Los suecos, un pueblo al que por lo general envidio poco (quicir, estoy bien donde estoy, con el color de pelo que tengo y mis 1’65 de altura -más hobbit que elfo-), en esto me tienen entregá: tienen 16 meses de baja, y además compartida. Pallorar.
En mi caso particolare, soy mami pringada autónoma, fue una fiesta. Dada la flexibilidad (palmando pasta, claro) que te permite tener tu propio negocio, pude tener al gordo en casa hasta casi los once meses, pero… Pero pacientes tenía yo desde el quinto mes del peque, porque, amigos, trabajar hay que trabajar. Esto es así (hasta que me toque el maldito y esquivo sueldazo de la ONCE). ¿Cómo lo hicimos? Con ingeniería de horarios: yo estaba con el peque hasta las 5 de la tarde, hora en la que Mimaromo y yo nos decíamos «Hola» y «Adiós, cariño», nos dábamos un beso (corto, mu corto), y yo salía por la puerta pitando camino de la consulta. La palabra conciliación me da risa. Ja. Una risa sólo.
Eso implicaba un cansancio y una saturación que pa mi se queda. Y para Mimaromo. Y para la perra, que con su empatía canina seguro que también sufrió. Porque no nos engañemos, cuidar a un bebé -tú bebé- es maravilloso, pero cuando ya has cantado ocho veces la del barquito chiquitito (que no sabía, que no sabía, navegar), jugado por la que hace catorce con los cubos -que ya te haces la Torre Eiffel con los ojos cerrados-, gateado por el pasillo tanto que habéis pulido el parqué y te puedes ver las bragas reflejadas cuando llevas falda… Cuando has hecho todo eso y luego vas y te piras a currar, es fantástico, nada cansado y mola un montón. :S
Bueno, pues en este contexto de amor y extenuación estábamos cuando decidimos que ya era hora de que yo viviera el niño empezara en la Escuela Infantil. Dado mi estado de letal agotamiento, Mimaromo, al que amo, me obligó a que la primera semana de escuela, mientras durase el periodo de adaptación, no me cogiera pacientes para así disfrutar de algunas horas libres. En ese momento lo quise más que nunca. Pacomérselo Mimaromo. Yo ni había contemplado esa posibilidad, pero me aferré a ella como Gollum al anillo.
Aun con el cansancio yo estaba convencida de que iba a sufrir al dejar al peque en clase. Separarme por primera vez de él, después de once meses… Así que me preparé para el impacto dramático. Pero pasaron cosas. Para empezar el jodío peque no lloró ni un segundo, no extrañó, nada. Lo dejé en el suelo, cogió un juguete y ni volvió la cara para mirarme. Dolordemadrequetecagas, pero también alivio, así que dejarle no fue especialmente duro. Para otras mamis, pobres mías, sí: las veía ahí sufriendo, viviendo en carne propia una tragedia griega, su propio Titanic, el pico dramático final de La vida es Bella, y me daba cosica. Sé que es un momento duro, sé que se pasa mal, sé que lo que voy a poner ahora a lo mejor me hace impopular, pero… Amigos, yo tenía ante mi DOS HORAS LIBRES por primera vez en once meses.
Lo malo es que esta libertad (de una semana) que yo me había imaginado duró lo que tardó Migordi en chupar el primer juguete y pillar el primer resfriado, seguido de todos los virus tipificados en la Espasa-Calpe y toda enfermedad susceptible de ser tratada con lo indicado en el último Vademecum. Y en esas seguimos. ¡Qué guay! (de Bandai)
Resumen: No hay situación laboral buena ante la maternidad. Si eres empleada, caca. Si eres autónoma, caca (caca que además te cuesta dinero). Si no tienes trabajo, mojón total. Pero en cualquiera de estos casos, tómate un descanso. Te lo digo yo, y la Dirección General de Tráfico.
Moraleja: hagas lo que hagas, ponte bragas. A no ser que seas sueca.
21 respuestas
Dejar a nuestro pequeño en la guardería , nos da tiempo libre para hacer tareas pendientes o simplemente dedicarlo para uno mismo.
Prepararse un baño caliente con sales naturales, es una fantástica idea para desconectar de la rutina y coger engerías.
Un saludo.
Jeje la verdad es que los peques son una caja de sorpresas, nunca sabes como van a reaccionar y te sorprenden!
Creo que es muy importante sacar tiempo para una, muchas veces, casi siempre complicado por eso cuando lo conseguimos hay que disfrutarlo a tope !
Me parece fenomenal, cada uno ha de hacer lo que crea que es mejor (o lo que pueda, jejeje)! El día que lo lleves al cole, puessss… Pues a lo mejor no es tan horrible, fíjate en mi petardo, que ni me miró el gachón cuando lo dejé! 😉
Un besito!
Bueno, yo por ahora he optado por quedarme de excedencia cuidando al peque, es lo que me pide el cuerpo y él encantado. Temo el día que lo tenga que dejar.
Un gran post como siempre!
"Tesis de tarde", buen título para un libro, o la segunda parte de la peli de Amenábar (también de angustia, como la primera, pero de angustia de madre sin tiempo, que eso sí que da miedo).
¡Gracias, guapa!
Esas dos horas me dieron la vida! XD
Ay, pobre. ¡No al modo mojón! Ya verás como algo se te ocurre: al final todas salimos adelante… Quizá por eso los políticos piensan que la situación de la conciliación en este país está bien como está. Cagontó.
Jajaja, me ha encantado!
Pues yo estoy igual, de turnos con mi maromo particular y a mi me toca el de tarde, así que escribo la tesis con un gracejo sin igual…
Qué bueno! Yo ahora mismo estoy en modo mojon total on, pero con mucho agobio encima porque a ver cómo oriento mi futuro que el periodismo y la maternidad como que casan chungamente. En cuanto a las dos horas… quién las pillara!! Un besaaazo
¡Anda que no no se nota cuando haces algo sin peques! Te sientes la leche de productiva, resolutiva y rauda. XD Y lo que dices del Nirvana… ¿tú te acuerdas de la última vez que te aburriste? Yo tengo que hacer un esfuerzo, porque hace eones que no me pasa!
¡Pues creo que eres oficialmente la PRIMERA SUSCRIPTORA! 😉 ¡Te hago la ola!
Es necesario, y lo digo en serio, en plan psicóloga mode on. Como sea hay que buscarse un ratito para uno (y esto va también para los papis).
¡Maldito barquito!
¡Gracias, guapa!
Bueno, es que ese momento "tengo tiempo para mí" es glorioso. No creo que te haga impopular el comentario porque es de lo más popular; vamos, que la que diga que no ha sentido una explosión de alegría y relajación al ver que, aunque fuera, podía pasar la fregona sola, miente. Yo gozo esos momentos. En su mayoría tengo que hacer cosas: estudiar inglés, currar en casa, planchar … Pero el mero hecho de que me cunda ya es lo máximo. Si me rasco la barriga un rato ya alcanzo el Nirvana.
Un post muy gráfico a la par que cachondo. Enhorabuena (Me suscribí ayer y así no me pierdo ni uno)
Besis
Estamos fatal, a mi no me da la vida tampoco cuando dejo a la padawan en la guarde, y si, yo también creo que es necesario tiempo de relax, si no el barquito chiquitito acaba navegando por mis cojines jajajaja
Me ha encantado el post 😉
Besis
Mira tú que se me ha olvidao mencionar a las que trabajáis en casa, y eso que parte de mi trabajo, una grande, la hago ahí mismo, en casa. ES IMPOSIBLE currar con un bebé rondando a tu lado, imposible: tardas el doble en todo, y encima tienes que lidiar con la frustración de no estar ni a unas ni a otras al 100%. Maravilloso también. Todo maravilloso.
¡Gracias, moreno! 😉 Es que hay que reírse, de todo. En consulta (que aunque aquí Marujismo no se lo crea, luego soy una profesional formalita -más o menos-) siempre procuro utilizar el humor, porque si uno es capaz de reírse de algo dramático, o serio, que le esté pasando es porque está tomando perspectiva del problema, y eso es genial para abordarlo y atajarlo. Hombre, no es que esté todo el rato ahí jaja jaja, pero tú me entiendes.
Muchas gracias por el comentario, y por pasarte por aquí. ¡Yupiiii!
jajaja, loquilla, dice… XD Lo de autónomos es que es la monda lironda, o me río o lloro, y prefiero reír. Un besote!!!
Es que un ratico aunque sea hay que intentar desconectar, porque por mucho que se les quiera una acaba saturada perdida. Y ya bueno, si me dices que uno de los dos está malo, y sólo queda uno en pie al 100%, ya cágate lorito!
Ánimo con esos planes, seguro que algo se te ocurre para hacerlo!!! 😉
Trabajar desde casa según la gente es un auténtico lujazo.
-Podrás cuidar de ella mientras trabajas y así no tendrás que dejarla-
Ya, ya…teniendo en cuenta que he tardado como cosa de 40 minutos en terminar de leer este post entre cocazos inesperados, puñados de gafas varios y reflujos calentitos en el hombro, está la cosa como para sentarse en el ordenador y pretender que la faena te cunda al menos la mitad que antes.
Le has puesto humor a un tema que no tiene ni gracia. Sólo por eso ya mereces mi más absoluta enhorabuena 😛
Sencillamente… GENIAL. En este país la (in)conciliación laboral es de chiste. Y ya del tema autónomos ni te cuento. Tú mejor que nadie lo sabes. Menos mal que este post pone un toque de humor al panorama. ¡ME ENCANTA! Muchos besos, loquilla 🙂
Aclaración: 2, 3 horas, 2/3 veces a la semana!!! Si fuese cada día, ahí ya quizá organizarme de otra manera. Peeeero, es lo que hay. Y agradecida.
Ay guapa… Españistán!!!
Te entiendo.Mi peque ahora con casi 9 meses se queda 2, 3 horitas con mis suegros. Antes de eso no existía nada de tiempo para mí.
Esta semana ha sido la reosti con el Superpapá con gripe. Entre otras cosas, tendiendo la ropa a más de las 12 de la noche y con la peque en brazos.
Y yo algún día de estos también debería volver a currar. Pero como tú, tenía mi chiringuito de bisutería y creaciones handmade. Ahora no sé cómo me lo voy a montar porque no es lo mismo… ¡Algo se me ocurrirá! jiji
Un beso