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9 cosas que ya no serán lo mismo ahora que eres madre

A estas alturas del blog si empiezo diciendo que la maternidad te cambia la vida lo más probable es que dejes de leerme por ser Dña. Obvia (no lo hagas, por favor, ¡que ahora mejora la cosa!). Pero no es de cómo nos cambia de lo que quiero hablarte hoy, sino de esas cosas que de pronto, al ser madre, dejan de ser lo que eran y se convierten en otra cosa, de esas palabras que ahora tienen otro significado. Porque si te digo «Traje de noche», ¿en qué piensas, ahora que eres madre? (Duda: ¿habrá inventado alguien el vestido de fiesta de franela? Me interesa.)

Ella antes y ella después de ser madre

 

Esto antes era otra cosa

  • Orden. Con la maternidad pueden pasarte dos cosas: o bien que fueras desordenada y al introducir en tu vida a un ser pequeño (que viene con más complementos que cualquiera de las Kardashian) te invada la necesidad de orden, o bien que fueras ordenada y ahora vivas con un tic en el ojo porque hay piezas de Lego, churros dibujos de tu retoño, piedrecitas (miles de millones), hojas (casi más que piedras) y… ¿pero esto qué es?, por todas partes. La cuestión es que vas a flipar y a recoger muchas cosas… muchas veces, ya te lo digo.
  • 2 minutos: antes de ser madre para ti 2 minutos eran exactamente 120 segundos. Ahora cuando tu hijo te dice que le dejes dos minutos más viendo la tele, en la bañera, en el parque de bolas, en casa de su amigo, donde sea… ahora esos 2 minutos pueden llegar, perfectamente, a la hora y media.
  • Aburrimiento: al parir decimos Hola a una nueva vida y Adiós al aburrimiento… forevah and evah. Nunca más vas a volver a poder aburrirte, entre otras cosas porque no te va a dar tiempo (con intentar dormir ya vas bien) y porque ese juguete que encargaste (y que tardó 9 meses en venir) tiene una batería que NO SE AGOTA. NUNCA.
    • Bueno, miento, sí que puedes experimentar lo que es aburrirse como un mono: pasar una tarde en el parque. Cuidao, que seguro que entre vosotras, oh, amadas mías, alguna es de las de «Pues a mí me gusta el parque» (piis i mí mi guisti il pirqui), pero seguro que es porque o vais en pandi o porque… Mira, no lo sé, ¿por qué te gusta el parque? Cuéntanoslo.
  • Vacaciones: antes te ibas de vacaciones y, al loro, descansabas. ¿Te acuerdas? Ahora es: maletas, «¿Hemos llegado ya?», «Esta casa no está EN la playa», «Yo no quiero ir a la montaña», «Me quiero volver a casa», «¡Yupi! ¡Esta es la mejor casa del mundo!», «¿Por qué nos vamooooos?», «¡Yo no me quiero ir!», maletas, atasco, casa. ¿Disfrutas? Disfrutas. ¿Descansas? No. No al menos hasta que tus hijos tienen… (Ruego a las lectoras que hayan conseguido descansar unas vacaciones que indiquen las edades de sus retoños, necesitamos esperanza).
  • Dormir: jajajaja.
  • Baño: antes era el sitio de hacer tus cosas, de ponerte bonica, de la higiene y el confort olfativo. Ahora es un refugio, casa, escondite, el lugar que te posibilita dos minutos (de los de 120 segundos de verdad, no de los de tu hijo) de respiro… siempre y cuando tengas pestillo y lo eches. Si no cierras a cal y canto, el baño es ese lugar en el que tus necesidades se convierten en espectáculo público abierto a comentarios («¿Ya has terminado de hacer caca, mamá?», «¡Qué peste tus pedos!» –tu dignidad saltando por la ventana en ese momento-).
  • Spa: que te lave la cabeza el peluquero AHORA ES UN SPA for you. El cansancio es tal que el concepto spa queda rebajado hasta los límites legales de la acepción, pero mira, también están buenos:
    • Cuando tu marido te agarra de los hombros, como simple gesto, y tú, que tienes la espalda tan jodida fastidiada que eso te pone en modo mantequilla en el microondas.
    • Cuando tu hijo pasa sus coches por tu espalda mientras juega.
    • Cuando la enfermera te toma la tensión y te agarra del brazo…
    • ¿Es triste esto? Lo es. Pero si con esto te da gustirrinín, imagina cuando de verdad vayas a un spa, ¡lo mismo te quedas bizca del pleasure, prima!
  • Cine: las madres (y los padres) vemos muchísimo cine. Mucho. Concretamente muchos títulos de crédito, porque lo que es la peli… ¡a ver quién aguanta despierto! Y da igual la hora a la que la pongas: tu cerebro detecta que hay peli, tu culo que hay sofá y adiós muy buenas. Fundido a negro. Fin. Ende.
  • Amor: cuando tú te creías que habías experimentado el amor así con mayúsculas, cuando pensabas que ese día que el corazón casi te explota de tanto querer había sido el más intenso de tu vida, entonces vas y eres madre. No se trata de establecer comparaciones, cada amor es distinto (eso es lo maravilloso del amor), pero precisamente por ser diferente este nuevo amor te deja loca, tanto que a ratos te hace llorar de puritita emoción (y un poco de sueño también, no vamos a negarlo). Brutal. Maravilloso. Alucinante. AMOR QUE TE CAGAS. ¡A disfrutarlo!

Y tú, ¿eres de vestido o de pijama de franela los sábados? ¿Alguna vez has salido a la calle en pijama? (Di la verdad, ¿has llevado al niño al cole con el pijama debajo del abrigo?). ¿Cuál fue el momento de morir de amor total que recuerdas de cuando tu peque era un bebé?

Ay, voy a darle un beso a mis niños ahora que están dormidos (Estaría bonito que con el ataque de amor les despertara… Autocontrol, Maricarmen).

Besitos de una madre que se ha puesto tierna.

 

14 respuestas

  1. Este post es muy interesante,
    Nosotros sabemos que cuando se tiene un hijo, el cuerpo cambia y estos pequeños cambios, pueden producir inseguridades.
    Como por ejemplo las varices finas o gruesas, por suerte tienen solución.
    Recomendamos que os pongáis en contactos con especialistas, para solventarlos.
    Un saludo.

  2. Hola a todas!
    Mi hijo ya tiene 5 añitos pero no durmió bien hasta los 4 yyyyyy….
    Os ha pasado que habéis perdido un poco el sueño y que ya no dormís como antes????… porqué el ahora duerme bien pero yo me sigo despertando!!!
    Un abrazo a todas.

  3. Que verdad con todo….ya no es sólo el dormir….q si, te duermes casi en cualquier parte…jajajaj….
    Que verdades en general….y la que más me ha marcado,una realidad enorme….mi momento el del baño…jajjajaja

  4. Ayy,me identifico con todo en lo que más en lo del parque,no lo soporto,es la cosa más aburrida y pesada del mundo,intento ir al que menos gente hay porque me da una pereza extrema mantener conversaciones con gente que no conozco (ya tengo bastante con 20 años de hablar con desconocidos trabajando cara al público),llámame rara-extraterrestre,jajaja

  5. Bueno…yo ahora creo que «juego en otra liga» mis hijos tienen 11 y 6, y aunque la peque aún se viene alguna noche a nuestra cama y yo me levanto al día siguiente con la espalda echa un 8… los momentos parque son más relajados, porque si no conozco a nadie, me relajo, directamente disfruto de ese tiempo sin hacer NADA, sólo mirar como juegan mis hijos, si hay alguien conocido, pues oye, lo de chafardear, nunca viene mal.
    Lo de dormir, he de decir que soy buho, madrugar lo llevo FATAL y en casa el padre y los hijos son alondras, así que el papi se encarga de los peques mientras yo aprovecho un rato más en la camita.
    Las vacaciones… pues sí, también se descansa, el papi se va a la orilla con los peques a saltar olas mientras esta mardre disfruta leyendo a la sombra de la sombrilla 🙂 ¡ojo! yo antes me los he llevado a comer un helado después de comer mientras el papi echa la siesta, eh!
    Paciencia…todo llega…yo estoy temblando ya de que me llegue la época en la que mi mayor quiera salir solo con sus amigos 🙁

    1. Claro, ¡eres nuestro futuro! jajaja ¡Da relajación leerte! Aunque todas las etapas tienen sus cosas (buenas y malas)… y, como dices, estás cerca de una muy diver, jojojo (Voy a leer otra vez la parte de estar en la playa oyendo las olas y tal…)

  6. Jajajajajaja, taaan identificada!!y estoy deseando que alguien diga edad para empezar a dormir(espero que sea pronto!!) Y el secreto del parque, porque…nunca pensé que me gustase tan poco un parque, y aún así ahí que estoy todos los días,o casi todos, que este frío viene muy bien para evitarlo, jijijiji. No despiertes a los niños, que luego se va el muerome de amor rapidito, por…¿¡Por qué no se duerme ya?!jajajajajaj

  7. Soy mamá primeriza y vaya que me veo en la imagen… de tener la casa de soltera súper ordenada y limpia a estar con mi bebé (ya de 7 meses) está siendo un proceso para mí, porque comienzo con el desorden… Juguetes por aquí y juguetes por allá, y el famoso dicho de «mañana los levanto, mañana lavo». Todo el tiempo es para él, sólo cuando en realidad debo tratar asuntos de trabajo debo encontrar el tiempo para alaciarme el cabello, ponerme esos vestidos que me encantan y maquillarme, sino con un chongo y cualquier ropa basta para el día. Sin embargo nada de eso que hacía antes de él importa… Cada vez que lo miro pienso en lo hermoso y lindo que es y sé que no voy a recuperar esos momentos, no queda más que disfrutar; para viajar, salir con amigas, arreglarme ya habrá tiempo pero las sonrisas que me regala ahora quedarán en mis más preciados recuerdos.

    1. Ay, Iris, estoy totalmente de acuerdo contigo! Al final es un tema de prioridades, ¿verdad? Yo también pienso que hay cosas de ellos que no se van a volver a repetir, así que hay que aprovechar! Muchas gracias por pasarte y comentar!

  8. Este post ME REPRESENTA. Excepto en lo del parque. A mí me encanta. Libertad para todos, que en casa se nos caen las paredes. Si voy sola pienso o lo doy la chapa al de al lado. Si voy con alguien pues de compadreo.
    Mi momentazo más intenso fue una mirada de mi segundo una madrugada de olor a leche y cacas de esas de bebé que huelen a palomitas. Fue una conexión brutal e inexplicable. Sí, con un ser que igual apenas ni me veía pero… ahí hubo algo. Ja,ja,ja. Fue maravilloso. Ojalá pudiéramos recuperar esos momentos cuando quisiéramos.

    1. Entiendo que lo de la libertad parquil guste, pero… me aburro. Esa mirada in the middle of the night también me ha pasado, y tela de amor!!! Totalmente contigo, ojalá se pudieran revivir esos momentos (y a poder ser sin el olor).

  9. Jajajajajaja, lo del sueño creo que es lo que me mata… porque siempre había sido medio lirón y ahora me he vuelto un búho. La verdad que no he extrañado eso de no salir por las noches, tenemos mejores planes en familia y hay que adaptarse : )

    1. Es que lo de dormir es de las cosas que más cambia, ¿eh? Yo también era de levantarme a las mil y monas los findes después de haber dormido horas y horas… Pero bueno, también te digo que conforme van creciendo van durmiendo más: hay luz al final del túnel! jajaja Gracias por comentar, guapa!

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Foto de Mamen Jiménez en su consulta, sonriendo, y con un vestido rojo

Psicóloga (tengo mi consulta, doy talleres y charlas...), bimami (10 años y 6 años, ole), escribo y dibujo sobre psicología, pareja, maternidad... y lo que surja (o me dé tiempo). Podría vivir a base de gazpacho.
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